domingo, 27 de noviembre de 2011

RECORTES EN SERVICIOS SOCIALES



RECORTES EN SERVICIOS SOCIALES

En pleno año electoral (locales y regionales de mayo / generales de noviembre), uno de los elementos clave de los debates políticos se ha centrado y se centra en el recorte de los servicios sociales en un escenario de crisis. Resulta ridículo escuchar argumentos como el de la racionalización del gasto o el de corregir la picaresca popular asociada a este país, viendo como se elaboran y distribuyen las partidas en los presupuestos públicos u observando algunas consecuencias directas de las decisiones que se están tomando para ‘salir’ de la actual coyuntura económica.

La cruda realidad.

El incremento del paro (España, con un 21,2%, el país europeo con mayor índice de paro. La media europea están el 10%1) y la desprotección económica (el gasto público social en España es el 22,7% del PIB, en la UE-27 es el 26,4% del PIB2) han provocado el aumento del riesgo de exclusión social y un aumento de los hogares bajo el umbral de pobreza.

El porcentaje de hogares que no reciben ningún tipo de ingresos ha pasado en 2010 a una tasa del 2,7 por ciento (lo que supone una cifra de más de medio millón de hogares) y los índices de precariedad y exclusión social se dispararon entre 2007 y 2009, con lo que la pobreza relativa en España alcanza ya a un 20,8 por ciento de la población (casi 10 millones de personas) en sólo un año (2008/2009) en España se registró un crecimiento de la pobreza en más de 1,3 puntos3.

En lo que respecta a los servicios sociales, la crisis se ha manifestado como un aumento de la demanda, en particular aquella con carácter asistencial.
En 2009 los Servicios Sociales públicos a nivel estatal ofrecieron información y/o ayuda a más de 8 millones de personas; un 36% de la población española más que en el año anterior. Cerca de 6 millones de personas perciben anualmente servicios sociales básicos y más de 700.000 personas reciben hoy día servicios y prestaciones de atención a la dependencia4.
El número de personas beneficiarias de renta mínima a nivel estatal aumentó más de un 50% en tan sólo dos años, pasando de algo más de 100.000 unidades familiares beneficiarias en 2007 a más de 150.000 en 2009, esto es, más de medio millón de personas. Muchos de ellos inmigrantes, cuyo número se duplicó entre 2008 y 20095.
En la ciudad de Madrid, los perceptores Renta Mínima de Inserción (RMI) eran 7.282, en 2009, y 8.018 en 2010. La ayuda individual ascendía en 2009 (últimos datos disponibles) a 370€ y a 540,4€ en caso de una pareja con dos hijos. Para hacerse una idea, al mismo tiempo los rangos los marcaban el País Vasco, con una ayuda individual de 640,6€ y Murcia con 300€. Igual en el caso de las cuantías para una pareja con dos hijos, 900,1€ euros en el País Vasco y 498 de Murcia. Madrid se sitúa en cifras menores sin tener en cuenta que si ya es difícil sobrevivir con esas cantidades, más aún lo es en la capital y en una de las ciudades más caras de España.

El perfil clásico de usuario de los servicios sociales ha cambiado o, más que cambiar, lo ha ampliado a nuevos sectores de la población. A los sectores de población clásicos en la atención de los servicios sociales (mayores, menores, mujeres, minorías étnicas y migrantes) hay que sumar a jóvenes con estudios y amplia experiencia laboral. Crece el número de familias jóvenes de cónyuges de entre 20 y 40 años de edad, con uno o dos hijos pequeños, así como jóvenes desempleados en busca del primer empleo.


El desempleo se ha extendido a amplias capas sociales. Se ha extendido y socializado el sentimiento de vulnerabilidad, el empeoramiento de la cohesión social. El contexto ofrece pocas alternativas concretas. El modelo de familia nuclear, pese a estar en pleno proceso de modificación, y las redes de solidaridad comunitaria tradicionales, a pesar de sus límites, parecen retomar de nuevo el protagonismo en la función de protección social. Este aumento de la precariedad en las condiciones de vida se ha traducido en un desbordamiento brutal del sistema de protección que prestan las entidades públicas y el Tercer Sector.

El paro eventual provocado por la crisis está pasando a ser de larga duración. Las estrategias de subsistencia para afrontar los efectos de la crisis, son, por este orden, el apoyo desde la familia, el trabajo en actividades de economía sumergida y la búsqueda de apoyo y ayuda en las organizaciones sociales6.

Las respuestas del sistema.

Los recortes en servicios sociales se concretan en forma de pérdida de cantidad y calidad de servicios que se venían dando. La reducción de los recursos disponibles hace que los profesionales tengan menos opciones y herramientas de intervención en la mejora de las circunstancias concretas de las personas a las que atienden.
Un ejemplo concreto sería el recorte del presupuesto para la implantación progresiva de la Ley de Dependencia.
El presupuesto de 2011 para la implantación de la Ley de Dependencia es de 83 millones menos (una rebaja del 5%) de lo previsto. El Plan Concertado, que determina el dinero que las autonomías dan a los ayuntamientos para las ayudas sociales, se ha rebajado en 11,5 millones (un 12% menos). Los Presupuestos Generales del Estado presentados para 2011 han roto por primera vez la previsión de financiación que se preveía en el modelo de la memoria económica de la Ley de Dependencia. El proyecto de presupuestos no sólo no ha aplicado el incremento previsto para 2011 sino que ha reducido la aportación de la Administración Central en un -5,2% respecto del año pasado7.

En Madrid, con un 0,63 de beneficiarios con prestación en relación a su población (a 1 de octubre de 2010) el grado de implantación de la Ley de Dependencia está muy por debajo de la media estatal de 1,34. A fecha actual, de un total de 135.298 dictámenes, 76.744 personas (el 1,19% de la población de la Comunidad de Madrid, por debajo del 1,57% de atención que marca la media nacional) son beneficiarias y perciben algún tipo de prestación en materia de dependencia8. Se trata de una merma en servicios como el de prevención de la dependencia y promoción atención personal, teleasistencia, ayuda a domicilio, centros de día/noche, atención residencial y las prestaciones económicas vinculas al servicio, los cuidados familiares y la asistencia personal.

Es cierto que algunos presupuestos han subido, pero lo han hecho a un ritmo menor del crecimiento de la demanda.
En el año 2010, en la ciudad de Madrid, se tramitaron prestaciones económicas periódicas, de carácter puntual y de emergencia social, por un total de 5.152.463,29€9. La misma cantidad que en 2009 a pesar del aumento de demanda. En el período 2007/2010 se ha incrementado en un 11% el número de ciudadanos que han accedido a los Servicio Sociales a través de la Primera Atención madrileña. De las 116.187 personas atendidas en la Unidad de Primera Atención en el 2010, 62.158 son personas nuevas que acuden por primera vez a los Servicios Sociales, lo que representa un 53,5% del total.

Del total de 145.871 demandas o peticiones planteadas en la Unidad de Primera Atención de los diferentes distritos de la capital, destacan como más frecuentes las de Informe de Arraigo Social por parte de personas inmigrantes, las demandas del Servicio de Ayuda a Domicilio (Auxiliar Domiciliario) y de Teleasistencia, seguidas en cuarto y quinto lugar por las demandas relacionadas con la Solicitud de Dependencia y con la Renta Mínima de Inserción.

El volumen de usuarios incluidos en las unidades familiares o Historias Sociales de la UTS (Unidad de Trabajo Social) de Zona de la ciudad, con las que se ha realizado intervención social o se ha llevado a cabo algún tipo de actividad a lo largo del periodo 2007-2010 también es ascendente, pasando de 276.558 usuarios de Zona en el 2007 a 339.255 en el 2010, lo que representa un crecimiento en este cuatrienio de un 23%.

En 2010 las demandas nuevas en la UTS de zona alcanzan un total de 98.542 en los 21 distritos. Las más frecuentes son (demanda nº demandas % s/total): 1. Ayuda a domicilio/Auxiliar domiciliario 25.651 26%. 2. Renta mínima de inserción (RMI) 15.466 16%. 3. Dependencia 8.939 9%. 4. Centro de día mayores municipal 3.170 3%. 5. Escuela infantil 2.776 3%. Hay que reconocer que la reestructuración del sistema madrileño de servicios sociales desarrollado en los últimos años ha facilitado el acceso al servicio con el aumento de centros y número de profesionales.

La ciudad de Madrid cuenta con 304 centros de atención social, que incluyen 35 centros de servicios sociales, más de 190 centros para los mayores, 40 centros de atención a las familias, 20 para las mujeres, 11 para inmigrantes, 6 para personas sin hogar y 2 centros para personas con discapacidad.

El compromiso electoral del PP de Madrid para el final del periodo 2011-2015, ya veremos
si se cumple, es disponer de un trabajador social por cada 5.000 habitantes e implantar un
centro de servicios sociales generales por cada 90.000 habitantes como media10.

En todo caso, parece que facilitar la entrada al sistema no es suficiente para dar respuesta a las necesidades que se están presentando. A la par que el aumento de demanda, paradójicamente, ha aumentado el número de derivaciones del sistema público de primera atención a los servicios que presta el tercer sector. La intervención desde la institución pública, quizá con ánimo de ahorrar gasto, está ahora priorizando una vieja demanda de sus profesionales, enarbolada sobre otros argumentos: priorizar el uso intervenciones técnicas de profesionales sobre el de prestaciones monetarias.

Del conjunto de usuarios del sistema público de servicios sociales de Madrid, un 78% (90.603 personas) han resuelto su demanda en Primera Atención; un 2% (2.121 casos) han sido orientados a otros servicios o sistemas de protección, y un 19% (22.227 casos), han requerido una intervención más continuada en el tiempo, pasando a la Unidad de Trabajo Social de Zona. El propio Ayuntamiento en su memoria anual destaca el alto nivel de resolución (más dos tercios de los ciudadanos atendidos) de las demandas planteadas en la Unidad de Primera Atención.11.

Sin embargo esta información contrasta con otras que incluso parecen cuestionar la realidad de esta pronta resolución. Según Cáritas12, el 67% de las personas que atienden vienen derivadas desde los servicios sociales públicos. Así, su número de respuestas ofrecidas en todo el país se ha disparado en los cuatro últimos años, al pasar de 400.000 personas atendidas en 2007 a 950.000 en 2010, unas 300.000 acudieron por primera vez a Cáritas.

A este respecto, se señala13 que mientras el tiempo para concertar una primera cita o entrevista inicial en los servicios sociales públicos es, como media, de casi un mes (25,9 días), en los servicios de Acogida de Cáritas la espera para concertar una primera cita o entrevista inicial es, por término medio, de 4 días. Otro tanto sucede con las respuestas, ya que si el plazo de tramitación y gestión de las respuestas efectivas es de algo más de dos meses en los servicios sociales públicos (65,3 días), en Cáritas el tiempo medio entre la primera cita y la respuesta efectiva es de 7,3 días.

Como vemos, la protección social no sólo atañe a la institución pública, también al tejido social construido por la sociedad civil y que durante años ha significado un partenariado fiel a la hora de desarrollar programas y proyectos de corte social.

El recorte o anulación de la financiación de los proyectos que desarrolla el tercer sector
uno de los elemento clave ya que el de los servicios sociales es un sector fuertemente privatizado.

El Área de Gobierno de Familia y Servicios Sociales del Ayuntamiento de Madrid14 tramitó en 2010 166 Convenios de Colaboración: 23 se han suscrito con otras Administraciones Públicas, 9 con entidades públicas y 134 con entidades privadas con un gasto correspondiente a la cantidad de 48.677.722 euros. Una cantidad importante.

Pero más allá de grandes e históricas organizaciones, existe un amplio y diverso universo de pequeñas y medinas entidades sociales que vienen desarrollando una labor fundamental y útil en la atención y cobertura de necesidades concretas, a muchas de las cuales la propia institución pública no puede llegar. Reconociendo sus límites y el valor de la proximidad y el conocimiento específico de realidades, la propia institución pública ha venido financiando la actividad de esta amalgama de entidades. La excusa de la crisis ha supuesto también un recorte importantísimo de esa financiación.
El recorte de salarios no sólo ha afectado a los del funcionariado. Amparándose en los manidos discursos del ajuste del cinturón y la política de austeridad, también ha repercutido en el resto de trabajadores/as de contratas y subcontratas externalizadas. Además, considerando la deuda reconocida del Ayuntamiento de Madrid que ascendía a 7.008 millones de euros en el primer trimestre de 2010, la anulación de partidas, la congelación de presupuestos e incluso los impagos por parte de las administraciones públicas están a la orden del día.

Por poner un ejemplo, desde el inicio de la crisis, la actividad de Cruz Roja15 se ha incrementado en un más de un 28%. Para hacer frente al aumento de actividad ha sido preciso incrementar la aportación de fondos propios en un 25% desde 2008. Desde que comenzara la situación socioeconómica actual en 2008, Cruz Roja Madrid ha atendido las necesidades sociales de más de 182.000 personas residentes en la Comunidad. Para ello, la organización ha precisado incrementar su aportación de fondos propios, que han pasado de los 13.101.647€ en 2008 a 17.415.707€ en 2010. De esta forma, en 2010, las aportaciones de los socios han representado el 73% del total de los fondos propios de la organización.

Otro ejemplo claro atañe a fórmulas empresariales de economía social. Si el escenario está difícil para las grandes entidades, con mayor capacidad de maniobra y aguante en momentos difíciles, para las pequeñas cooperativas de iniciativa social, en particular aquellas que se centran en la intervención social como actividad profesional, el camino se pone muy cuesta arriba.
A los ere’s y cierres de alguna de ellas debido al poco movimiento de proyectos y a las demoras en los pagos (recortes indirectos) hay que añadir otros obstáculos para las que resisten en forma de recorte directo, como las ayudas para el fomento del empleo y mejora de la competitividad en las cooperativas y sociedades laborales en el ámbito de la Comunidad de Madrid pasaron de 2.200.000€ en 2009 a 955.000€ en 2010. Un recorte del 57% del presupuesto.

La Comunidad de Madrid parece sentirse cómoda con la práctica del recorte y del impago. El Comité de Entidades de Representantes de Personas con Discapacidad de la Comunidad de Madrid (CERMI), que aglutina a asociaciones de alzhéimer, de esclerosis múltiple, párkinson, fibromialgia, etc., ha denunciado el impago de las subvenciones concedidas el año pasado para el desarrollo de programas de prevención de la enfermedad, ayuda mutua y autocuidados para enfermos crónicos.

Hay unas 80 asociaciones sin ánimo de lucro afectadas. Tampoco se sabe nada de las subvenciones de este año. Algo similar ocurre con las ayudas destinadas a asociaciones que trabajan con drogodependientes. Se trata del cierre de 11 de los 18 pisos en los que residen por temporadas drogodependientes en tratamiento o en proceso de reinserción. Hay 65 asociaciones afectadas16.

Se podrían seguir poniendo ejemplos, todo ello a pesar de lo complejo que resulta realizar un análisis presupuestario detallado en servicios sociales considerando la diversidad de problemáticas a atender, las competencias y el número de instituciones y organismos encargados de hacerlo y las vías de financiación de sus prestaciones y programas.

Una clave para afrontar el futuro.

Durante años el Estado de Bienestar (EB), ha desempeñado un papel importante en la función de estabilidad económica y orden político. Para ello la población ha debido aceptar un sistema que genera desigualdad estructural, si bien es cierto que ha intentado y a veces logrado moderar realidades, situaciones y problemáticas más dramáticas y sangrantes.

Previo al estallido de la crisis, se vivió una época de crecimiento que hizo que los sistemas de
protección se afianzaran en el cumplimiento de su función tradicional de aseguramiento de la cobertura mínima ante los riesgos que no puede cubrir el Mercado. Fueron años de bonanza que, sin embargo, no se aprovecharon para consolidar otra de las funciones más importantes del EB: la redistribución.

Muy al contrario de un ideal de redistribución asociado a nortes de igualdad, se ha profundizado en la diferencia, aumentando la dualidad social, gracias a duros procesos de privatización de servicios.
La presión de los mercados retroalimenta a un poder político cada vez más cómodo en el nuevo papel de árbitro (con facultad normativa y reguladora) y mediador (con facultad de inspección, seguimiento y prescripción). Un matiz en la gestión que efectivamente no tiene consecuencias en la titularidad pero sí en la responsabilidad que se están concretando en una merma de calidad que parece encaminarnos a la aceptación de la pérdida de la universalidad. Un cambio de concepción de lo que era un derecho a lo que será un privilegio.

La búsqueda de realidades divergentes a este escenario pasa, en primer lugar, por entender que la crisis no es pasajera porque es una crisis del sistema y por tanto el EB caerá con él. Lo importante quizá sea pensar en una alternativa o alternativas posibles. Se trata de repensar y reestructurar los actuales modos de vida y organización social.

  
1 Fuente: Eurostat. http://epp.eurostat.ec.europa.eu/tgm/table.do?tab=table&plugin=1&language=en&pcode=teilm020
[Consulta: 14 de octubre de 2011. 13:06h.].

2 Fuente: Alianza para la defensa del Sistema Público de Servicios Sociales.
http://www.cgtrabajosocial.es/madrid/documentos/Doc-AlianzaDef-Sistema-Publico-IDEAS-FUERZA.pdf [Consulta: 15 de octubre de 2011. 13:15h.].

3 Fuente: Cáritas. http://www.caritasalamanca.org/uploads/media/1er_ImpactoCrisisCohesionSocialEspana_Julio2011.pdf
[Consulta: 15 de octubre de 2011. 13:30h.].

4 Fuente: Alianza para la defensa del Sistema Público de Servicios Sociales. Relación de entidades que integran la Alianza:
Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), Confederación Española de Organizaciones de Mayores
(CEOMA), Confederación Española de Organizaciones en favor de las Personas con Discapacidad Intelectual (FEAPS),
Comité Español de Representantes de Minusválidos (CERMI), Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión
Social (EAPN), Asociación Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales, sindicatos Unión General de Trabajadores
(UGT) y Confederación Sindical de Comisiones Obreras (CC.OO.), Seminario de Intervención y Políticas Sociales
(SIPOSO), Instituto de Trabajo Social y de Servicios Sociales (INTRESS) y las Universidades de Alicante, Alcalá de Henares,
Girona y Complutense de Madrid.
http://www.cgtrabajosocial.es/madrid/documentos/Doc-AlianzaDef-Sistema-Publico-IDEAS-FUERZA.pdf [Consulta: 15 de octubre de 2011. 13:15h.].

5 Fuente: Cáritas. http://www.caritasalamanca.org/uploads/media/F_1863_Capitulo_2_VI_Informe_Foessa.pdf [Consulta: 15 de octubre de 2011. 13:33h.].

6 Fuente: Cáritas. http://www.caritas.es/noticias_tags_noticiaInfo.aspx?Id=5051 [Consulta: 15 de octubre de 2011. 13:25h.].

7 Fuente: CC.OO. http://www.ccoo.es/comunes/temp/recursos/1/664167.pdf [Consulta: 15 de octubre de 2011. 13:37h.].

8 Fuente: IMSERSO. (Portal de la Dependencia) del Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad.
http://www.dependencia.imserso.es/InterPresent2/groups/imserso/documents/binario/estsisaad20111001.pdf [Consulta:
de octubre de 2011. 13:24h.].

9 Fuente: Ayuntamiento de Madrid. http://www.madrid.es/portales/munimadrid/es/Inicio/Ayuntamiento/Servicios-
Sociales/Publicaciones/2010?vgnextfmt=default&vgnextoid=75eb930567300310VgnVCM2000000c205a0aRCRD&vgnextchannel
=d3f4ca1c5a057010VgnVCM100000dc0ca8c0RCRD [Consulta: 15 de octubre de 2011. 13:19h.].

10 Fuente: PP Madrid. http://equipogallardonprograma.com/wp-content/uploads/pdfs/programappmadrid.pdf [Consulta:
de octubre de 2011. 13:22h.].

11 Fuente: Ayuntamiento de Madrid. http://www.madrid.es/portales/munimadrid/es/Inicio/Ayuntamiento/Servicios-
Sociales/
Publicaciones/2010?vgnextfmt=default&vgnextoid=75eb930567300310VgnVCM2000000c205a0aRCRD&vgnextchannel=d3f4ca1c5a057010VgnVCM100000dc0ca8c0RCRD [Consulta: 15 de octubre de 2011. 13:19h.].

12 Fuente: Cáritas. http://www.caritas.es/noticias_tags_noticiaInfo.aspx?Id=5051 [Consulta: 15 de octubre de 2011.
13:25h.].

13 Fuente: Ayuntamiento de Madrid. http://www.madrid.es/portales/munimadrid/es/Inicio/Ayuntamiento/Servicios-
Sociales/Publicaciones/2010?vgnextfmt=default&vgnextoid=75eb930567300310VgnVCM2000000c205a0aRCRD&vgnextchannel=d3f4ca1c5a057010VgnVCM100000dc0ca8c0RCRD [Consulta: 15 de octubre de 2011. 13:19h.].

14 Fuente: Ayuntamiento de Madrid. http://www.madrid.es/portales/munimadrid/es/Inicio/Ayuntamiento/Servicios-
Sociales/Publicaciones/2010?vgnextfmt=default&vgnextoid=75eb930567300310VgnVCM2000000c205a0aRCRD&vgnextchannel=d3f4ca1c5a057010VgnVCM100000dc0ca8c0RCRD [Consulta: 15 de octubre de 2011. 13:19h.].

15 Fuente: Entorno Social. http://entornosocial.es/content/view/2359/46/ [Consulta: 15 de octubre de 2011. 13:35h.].

16 Fuente: El País
http://www.elpais.com/articulo/madrid/pisos/drogodependientes/borde/cierre/elpepuespmad/20111017elpmad_5/Tes [Consulta:17 de octubre de 2011. 21:15h.].

DOCUMENTO ELABORADO POR JOSÉ.
GRACIAS POR TU APORTACIÓN.

1 comentario:

  1. Vaya un pedazo de artículo más bien currao.

    Gracias por vuestro trabajo

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